“Él dirigió Binance con deliberado desprecio por las responsabilidades legales y por su capacidad de causar daños significativos, y debido a su conducta, Binance procesó millones de dólares de ganancias ilegales”, se expresó en el informe de la fiscalía durante el juicio que llevó a cabo en Estados Unidos y que concluyó el pasado 30 de abril con la sentencia del fundador de esta empresa Changpeng Zhao, a cuatro meses de presión.
“Es mejor pedir perdón que permiso”, fue la frase que según los fiscales norteamericanos evidenció las estrategias que han hecho de Binance la empresa comercializadora de criptomonedas más gran del mundo.
Changpeng Zhao, ante el jurado reconoció culpabilidades, renunció a ser CEO de Binance y pagó los 4 200 millones de dólares que le impusieron.