El Banco Mundial autorizó un nuevo financiamiento al gobierno de México por 1,000 millones de dólares, con el propósito de fortalecer políticas públicas para el desarrollo financiero, sostenible e inclusivo en el país.
Según se dio a conocer, se trata del primer financiamiento solicitado por México para aprovechar el nearshoring, bajo la premisa de atraer inversiones sostenibles, incentivar la equidad de género, así como la adaptación y resiliencia al cambio climático.
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No obstante, de acuerdo con algunos apuntes de expertos economistas, lo anterior significa un monto mayor en comparación a los dos años anteriores cuando los préstamos requeridos de México al organismo fueron de 700 millones de dólares en 2022 y 2023, respectivamente.
Con ello, esta operación representa el mayor endeudamiento con el Banco Mundial desde 2021, cuando prevalecían las condiciones post-pandemia, con un monto de 1,725 millones de dólares para el país.